Lombroso positivismo biológico
El ejemplo más claro del determinismo biológico es la teoría de Cesare Lombroso. Lombroso basaba su teoría en la suposición de que los delincuentes presentan ciertos rasgos fisonómicos o anomalías. Lombroso quería poder detectar a los futuros delincuentes para aislarlos de la sociedad. Esto dio a la criminología un fuerte impulso para crear nuevos métodos de tratar a los delincuentes y prevenir los delitos. Lombroso daba a entender que los presos tenían rasgos faciales comunes. Si exagerar los criminales en la teoría de Lombroso pueden ser identificados a través de la forma de sus cráneos, la asimetría de la cara y la cabeza, grandes pómulos, orejas y labios, brazos largos y una nariz torcida. La teoría de Lombroso es la más antigua y…ver más contenido…Lombroso consideraba que estos “criminales natos” eran los “atavismos” de la sociedad.
Todas las teorías biológicas se basan en la idea de que los marcadores biológicos predeterminan el comportamiento delictivo. El núcleo de todas estas teorías es que los factores genéticos o cualquier anomalía heredada o adquirida a lo largo de la vida predisponen a los individuos al comportamiento delictivo. La teoría de Lombroso dio vida probablemente a casi todas las teorías biológicas que aparecieron después.
Teorías del delito
Sie befinden sich hier: Home / Teorías del delito / Teorías biológicas del delito / La antropología criminal de LombrosoLa teoría antropológica del delito de Cesare Lombroso supone que el delito es de naturaleza genética. En particular, Lombroso supone que se trata de un tipo atávico de delincuente.
Las teorías genéticas y los proyectos de investigación que abordan la delincuencia se pueden encontrar principalmente en Italia en el siglo XIX, en la historia alemana hasta 1945, pero ocasionalmente también en la actualidad. El fundador y principal representante de este enfoque es el médico y psiquiatra italiano Cesare Lombroso con su teoría antropológica de la delincuencia.
La tesis central de su teoría es el supuesto del delincuente nato. En consecuencia, existe el delincuente cuyo comportamiento desviado es inevitable. El delincuente no puede decidirse a favor o en contra de un delito, sino que actúa de forma totalmente libre y determinada. Este determinismo biológico es contrario al supuesto de la escuela clásica de criminología (según la cual todo ser humano es racional y tiene una libertad racional de elección y acción).
Teoría de Lombroso pdf
Este artículo esboza, por primera vez, las principales coyunturas de la memoria histórica de Cesare Lombroso y de la interpretación académica de su legado, desde su muerte en 1909 hasta la actualidad. El legado de Cesare Lombroso, cuya vida le situó en el centro de importantes controversias y como figura simbólica del positivismo italiano, ha sido objeto de repetidos conflictos y se ha utilizado para apoyar diversas causas, a lo largo de un periodo marcado por profundos y dramáticos cambios. Sin embargo, la reflexión historiográfica sobre su posición en el ámbito de las ciencias humanas, en particular en Italia y Estados Unidos, es mucho más reciente y aún no ha concluido.
1 En sus últimos días, en octubre de 1909, mientras escribía el prefacio de un volumen inglés que contenía una síntesis de la antropología criminal, Cesare Lombroso echó la vista atrás para ayudar a sus lectores norteamericanos a comprender “cómo surgieron en mi mente los primeros esbozos de esta ciencia”.1 Desde hacía algún tiempo, el padre de la antropología criminal había empezado a contar las historias de sus descubrimientos, y en sus breves relatos no siempre era sincero.2 A los norteamericanos, por ejemplo, les dijo que había conocido al famoso bandido Giuseppe Villella en la cárcel y que, más tarde, al hacerle la autopsia, había observado el hoyuelo occipital medio cuyo “descubrimiento” le llevó a deducir su teoría del atavismo criminal.3 Hoy sabemos que las cosas sucedieron de forma muy distinta: Lombroso fue su primer y poco fiable historiador.4 Tampoco podemos esperar mayor exactitud de los relatos de sus colaboradores: los de sus hijas Paola y Gina (el ángel de la guarda del mito de Lombroso), así como los de Hans Kurella, el hombre que popularizó la obra de Lombroso en Alemania (lo que dio lugar a una traducción al inglés en 1911)5 .
Teorías biológicas de la delincuencia
El 6 de noviembre de 1835 nació el criminólogo y médico italiano Cesare Lombroso. Lombroso fue el fundador de la Escuela Italiana de Criminología Positivista, y a menudo se le conoce como el padre de la criminología. Rechazó la escuela clásica establecida, que sostenía que la delincuencia era un rasgo característico de la naturaleza humana. En su lugar, utilizando conceptos extraídos de la fisiognomía, la teoría de la degeneración, la psiquiatría y el darwinismo social, la teoría de la criminología antropológica de Lombroso afirmaba esencialmente que la criminalidad era hereditaria, y que alguien “criminal de nacimiento” podía ser identificado por defectos físicos (congénitos), que confirmaban a un criminal como salvaje o atávico.
Cesare Lombroso fue famoso en el siglo XIX porque afirmaba haber descubierto la causa de la delincuencia[2]. Lombroso intentó discernir una posible relación entre la psicopatología criminal y los defectos físicos o constitucionales. La teoría general de Lombroso sugería que los delincuentes se distinguían de los no delincuentes por múltiples anomalías físicas. Postulaba que los delincuentes representaban una reversión a un tipo de persona primitivo o infrahumano caracterizado por rasgos físicos que recordaban a los simios, los primates inferiores y los primeros humanos y que, en cierta medida, se conservaban, según él, en los “salvajes” modernos. El comportamiento de estos “retrocesos” biológicos será inevitablemente contrario a las normas y expectativas de la sociedad civilizada moderna. Lombroso sostenía que estos delincuentes presentan un porcentaje más elevado de anomalías físicas y mentales que los no delincuentes. Entre estas anomalías, a las que denominó “estigmas”, se encontraban diversos tamaños de cráneo inusuales y asimetrías de los huesos faciales[1].