
Panspermie-theorie einfach erklärt
Durante el siglo XIX y principios del XX, las ideas relacionadas con el posible origen en el espacio de moléculas bioorgánicas, o semillas, o incluso gérmenes y organismos (y cómo llegaron a la Tierra) incluían la teoría de la Panspermia. Basada en la idea de la eternidad de la vida propuesta por eminentes físicos -como Arrhenius y Kelvin-, la “Panspermia” se divide principalmente en dos ramas: la litopanspermia (transporte de gérmenes dentro de piedras que viajan por el espacio) y la radiopanspermia (transporte de esporas por la presión radiativa de la luz estelar). Apuntamos algunos argumentos que ayudan a comprender si la “Panspermia” podría existir hoy en día como la misma teoría definida hace un siglo. Y nos preguntamos por el tipo de evolución que podría haber sufrido la ‘Panspermia’ en tan sólo unas décadas. Esta posible evolución del concepto de “Panspermia” tiene lugar en el marco de la aparición de un nuevo campo, la Bioastronomía. Presentamos cómo ha surgido esta disciplina durante unas pocas décadas y cómo ha evolucionado. Consideramos su relación con la progresión de otros campos científicos y, por último, examinamos cómo se incluye ahora en diferentes proyectos de las agencias espaciales. Dado que las investigaciones sobre bioastronomía se han hecho cada vez más sólidas en los últimos años, hacemos hincapié en varias cuestiones sobre las nuevas ideas y sus consecuencias para la hipótesis actual de la “Panspermia” y de la vida universal.
Panspermia dirigida
La panspermia (del griego antiguo πᾶν (pan) ‘todo’, y σπέρμα (sperma) ‘semilla’) es la hipótesis, propuesta por primera vez en el siglo V a.C. por el filósofo griego Anaxágoras, de que existe vida en todo el Universo. Se cree que se distribuye por el polvo espacial,[1] meteoroides,[2] asteroides, cometas,[3] y planetoides,[4] así como por naves espaciales que transportan contaminación no intencionada de microorganismos[5][6][7] La panspermia es una teoría marginal con poco apoyo entre los principales científicos[8]. Los críticos argumentan que no responde a la pregunta del origen de la vida, sino que simplemente la sitúa en otro cuerpo celeste. También se la critica porque no puede probarse experimentalmente[9].
La panspermia propone (por ejemplo) que las formas de vida microscópicas que pueden sobrevivir a los efectos del espacio (como los extremófilos) pueden quedar atrapadas en los desechos expulsados al espacio tras las colisiones entre planetas y pequeños cuerpos del Sistema Solar que albergan vida[10]. Los estudios sobre la panspermia no se centran en cómo comenzó la vida, sino en los métodos que pueden distribuirla en el Universo[11][12][13].
Teoría de la panspermia pdf
La panspermia es la hipótesis de que ya existen “semillas” de vida en el Universo, que la vida en la Tierra puede haberse originado a través de estas “semillas” y que éstas pueden llevar o haber llevado vida a otros cuerpos habitables.
La exogénesis es una hipótesis más limitada que propone que la vida en la Tierra fue transferida desde otros lugares del Universo, pero no hace ninguna predicción sobre su extensión. Dado que el término “panspermia” es más conocido, tiende a utilizarse en referencia a lo que propiamente se llamaría exogénesis.
Aún no hay pruebas concluyentes que lo apoyen o lo contradigan, aunque la opinión mayoritaria es que la panspermia -especialmente en su forma interestelar- es improbable dados los retos de supervivencia y transporte en el espacio.
Sir Fred Hoyle (1915-2001) y Chandra Wickramasinghe (nacido en 1939) fueron importantes defensores de la hipótesis, que además sostenían que las formas de vida siguen entrando en la atmósfera terrestre y pueden ser responsables de brotes epidémicos, nuevas enfermedades y la novedad genética necesaria para la macroevolución. Esta extensión también ha sido adoptada por los defensores de la ascendencia cósmica.
La teoría de la panspermia explica el origen del
Un nuevo artículo publicado esta semana en Frontiers in Microbiology explora la posibilidad de que los microbios y los organismos extremófilos puedan migrar entre planetas y distribuir la vida por el Universo, incluso en naves espaciales enviadas de la Tierra a Marte.
Se trata de una teoría no probada y bastante descabellada sobre la transferencia interplanetaria de la vida. Según esta teoría, las formas de vida microscópicas, como las bacterias, pueden ser transportadas por el espacio y aterrizar en otro planeta. De este modo, se generaría vida en otro lugar.
El experimento de exposición bacteriana tuvo lugar de 2015 a 2018 utilizando la Instalación Expuesta situada en … [+] el exterior de Kibo, el Módulo Experimental Japonés de la Estación Espacial Internacional. JAXA/NASA
Los investigadores de la Universidad de Tokio -en colaboración con la agencia espacial nacional japonesa JAXA- querían comprobar si la bacteria deinococcus podía sobrevivir en el espacio, por lo que la colocaron en paneles de exposición en el exterior de la Estación Espacial Internacional (ISS). Se sabe que es resistente a la radiación. Se expusieron muestras secas de distintos grosores al ambiente espacial durante uno, dos o tres años y luego se comprobó si alguna sobrevivía.